Bajo una misma luna
Deje que Aman y los cuerpos celestes le guíen en su viaje a casa durante esta temporada festiva.
Con una exquisita laguna de agua cristalina que ofrece olas moderadas y vientos fuertes y constantes, Amanpulo es un paraíso para los kitesurfistas. Los kitesurfistas de todos los niveles pueden lanzarse directamente desde la playa y perfeccionar sus habilidades en la vasta extensión de agua turquesa poco profunda de la laguna con fondo de arena y olas moderadas.


Con aguas cristalinas y cálidas y un fondo predominantemente de arena blanca con alguna pradera marinas, nuestra laguna se parece a una piscina natural, por lo que es fácil rodearla caminando y aprender a hacer «kitesurf».
La isla, ubicada estratégicamente para aprovechar el amihan (viento del noreste) ideal para los deportes de viento entre diciembre y marzo, también se beneficia del venturi provocado por islas vecinas más grandes.
Los huéspedes se comunican con el instructor a través de auriculares de radio para ganar velocidad, seguridad y facilidad de aprendizaje cuando están en el agua. Las clases también pueden incluir vídeos para revisar la sesión.
Cada clase de kitesurf está cuidadosamente diseñada para ser exhaustiva y personalizada, adaptándose al nivel individual de cada participante, desde principiantes hasta riders experimentados. A lo largo de la temporada de kitesurf, los huéspedes se benefician de la orientación experta de instructores certificados por la Organización Internacional de Kitesurf, que están a su disposición para garantizar un aprendizaje seguro y progresivo y una experiencia agradable en el agua.
Diseñado para principiantes sin experiencia previa en kitesurf, este programa de tres días incluye dos horas de instrucción guiada, que ofrece una introducción bien estructurada y práctica a este deporte. Los participantes aprenden los fundamentos, desde la teoría del viento y los procedimientos de seguridad hasta la configuración del equipo y las técnicas en el agua. Lo más destacado para la mayoría de los alumnos es el inicio en el agua, donde finalmente pueden montarse en la tabla impulsados por la cometa; un emocionante hito en su viaje por el mundo del kitesurf.